Un asesoramiento
a la medida

En un asesoramiento personalizado como el que prestamos, es fundamental el inicio de la relación con el cliente y, por ello, dedicamos todo nuestro esfuerzo a conocer y comprender en profundidad la actividad y la estrategia de las empresas que asesoramos.

Nuestro objetivo es brindarles la mejor solución jurídica y/o tributaria, respetando la normativa en vigor y considerando la doctrina administrativa y jurisprudencial, integrándola en el día a día del cliente sin que su aplicación le suponga unos costes indirectos que hagan imposible su puesta en marcha.

La cercanía con el cliente y la inmediatez en la respuesta, son los ejes básicos de nuestra práctica. Permiten establecer una relación de confianza, comprendiendo los problemas de primera mano y así acelerar los procesos de toma de decisiones.  

Historia
y trayectoria

Briz Jurídico Tributario nace en 1996. Ricardo Briz, cuya vida profesional había transitado por la función pública, tanto en el Ministerio de Hacienda, como de Inspector Financiero y Tributario, básicamente en servicios internacionales, y en el Instituto de Crédito Oficial. Prosiguiendo como CEO de grandes empresas, además de socio de E&Y pensó que, después de conocer el sector público y de haber participado como gestor de empresas en el proceso de toma de decisiones, era el momento de prestar un servicio a las empresas que aunase la experiencia adquirida en los distintos ámbitos profesionales que había recorrido, para prestar un servicio basado en el conocimiento de la empresa y de su entorno, bajo las máximas de proximidad, rapidez y eficacia.

El patrón que se buscó desde un primer momento fue el de una organización pequeña, que facilitase la interacción permanente con el cliente, es decir un despacho cercano y de trato directo con sus clientes. Un despacho de los llamados boutique, muy especializado, en derecho de la empresa y en concreto en derecho fiscal y mercantil con pocos clientes que huyese de las masificaciones propias en esta práctica, y que permitiese esos principios de cercanía, confianza e inmediatez que ha ido desarrollando a lo largo de los años, aumentando de forma progresiva la actividad y el equipo en función de la demanda del mercado.

Hoy en día, después de más de 25 años de práctica profesional, seguimos siendo un despacho boutique, muy especializado, con no más de veinte personas, y con un número limitado de clientes, a quienes, en su mayoría, acompañamos desde hace muchos años.

El conocimiento de la gestión empresarial y de la complejidad del proceso de la toma de decisiones que el fundador a intentando transmitir a todo el equipo de BJT ha sido fundamental en la tarea de comprensión de los elementos que coadyuvan a la realización de la actividad de sus clientes para darles la mejor solución en el ámbito jurídico, financiero y fiscal sin interferir en su gestión diaria.

Esto ha sido posible como consecuencia también de la integración en nuestro equipo de profesionales jóvenes y de una actualización permanente de todos los miembros del despacho, adaptándose a todas las tendencias del mundo empresarial de las últimas décadas en las que hemos pasado de organizaciones tremendamente estructuradas e intensivos en recursos humanos, a otras mucho más ligeras, y rápidas en la toma de decisiones, con un enorme componente tecnológico.

En la actualidad, seguimos participando, como miembros activos, en el proceso de toma de decisiones empresariales, tanto en sectores tradicionales, como, sobre todo, ayudando a empresas emprendedoras dentro del Ecosistema de las Starts-Up.